Infancia

La imagen central de la bandera como hamaca, que apoya y protege al niño, moldea la sociedad en el rol que es ocupado gráficamente por la bandera. En este sentido, la sociedad se involucra creando la alegría y soporte que la hamaca ofrece y que el niño merece.

El diseño está basado en la idea que la bandera, como representación de Argentina y el niño son una sola cosa juntos y que el resultado de esa integración es algo muy positivo, el niño sintiéndose apoyado y feliz.

Por lo tanto, gráficamente, la bandera es institucionalmente el eje del trabajo y el resto de las fuentes deben complementar de la bandera, humanizándola y regulando la tensión del conjunto, acorde a la expectativa general del mensaje.

La cara del niño fue la parte más difícil para mí de hacer, porque inicialmente no quería mostrar las facciones de la cara, ya que esto contribuía a definir un género en específico, algo poco importante en este caso. Al mismo tiempo, el no completar la cara también resalta la presencia de la bandera Argentina, ya que había menos información (la cara) en la imagen.

Sin embargo, la luz del fondo, el sentimiento de una luz detrás de la imagen daba una sensación misteriosa, quizás siniestra, que no quería representar. Por esa razón, definiendo en el grado justo las facciones pude contrarrestar la sensación extraña que producía encontrarse a una persona cuya cara no se puede ver, y que para empeorar las cosas, es azul.

En este sentido, la textura de la acuarela y la pureza del resto de los colores pueden dar una atmósfera cálida institucional pese a la frialdad del celeste y las rayas planas de la bandera.

Red Nacional para la Protección de los Derechos del Niño y del Adolescente

Imagen. 2001. Argentina.